El Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa representa un salto estratégico para la industria española en un contexto de cambio geopolítico, avance tecnológico acelerado y necesidad de autonomía estratégica. Este plan, alineado con los compromisos de la UE y la OTAN, refuerza la inversión pública hasta alcanzar el 2% del PIB en 2025, movilizando más de 10.000 millones de euros para modernizar capacidades, impulsar la innovación y fortalecer el tejido industrial nacional.
Ejes estratégicos y oportunidades tecnológicas
El plan se articula en torno a cinco ejes:
- La modernización de las Fuerzas Armadas
- El refuerzo de la ciberseguridad y las telecomunicaciones
- El desarrollo de nuevas capacidades de defensa
- La gestión de emergencias e impulso a la Innovación tecnológica
- La reindustrialización
En la propuesta lanzada por el Gobierno español, destacan el enfoque en tecnologías disruptivas como la Inteligencia Artificial, los sistemas autónomos, la sensórica avanzada, las comunicaciones seguras y las aplicaciones duales que, sin duda, generan sinergias entre los ámbitos civil y militar.
La colaboración público-privada y la implicación activa de pymes y centros tecnológicos son fundamentales para el desarrollo del sector. En ese sentido, el programa COINCIDENTE, gestionado por el Ministerio de Defensa, financia proyectos innovadores con funcionalidad militar en áreas estratégicas como baterías estructurales, generación de datos sintéticos para Inteligencia Artificial y sistemas de neutralización antiaérea. La cofinanciación puede alcanzar hasta el 80%, dependiendo del grado de innovación, de relevancia tecnológica y el tamaño de la empresa, facilitando así el impulso de tecnologías duales y el fortalecimiento del tejido industrial nacional.
Impacto económico y proyección internacional de la I+D en seguridad y defensa
Teniendo en cuenta que el 85% del sector está formado por pymes, hay que incidir en que este plan supone una oportunidad para acceder a financiación, desarrollar capacidades diferenciales y posicionarse en cadenas de valor globales. La inversión prevista no solo moderniza la defensa, sino que impulsa la Transferencia Tecnológica a sectores civiles, fomenta el empleo cualificado y refuerza la autonomía estratégica de España y Europa.
Innovación en seguridad y defensa: convierte el desafío en fortaleza
En un entorno tan exigente como el de la seguridad y defensa, para convertir los desafíos en fortalezas, impulsar las tecnologías transformadoras y asegurar el éxito a largo plazo es necesaria una estrategia sólida de financiación de la innovación. Solo así las organizaciones podrán evolucionar con agilidad, crecer de forma sostenible y reforzar su competitividad en un sector clave para el futuro.
En Ayming acompañamos a las empresas de defensa y seguridad en la identificación de oportunidades, la gestión de ayudas y subvenciones y la optimización de proyectos de I+D en defensa y seguridad. Nuestro conocimiento técnico y experiencia internacional nos permite maximizar el retorno de la inversión en Innovación, asegurar el cumplimiento normativo y facilitar la integración en consorcios y programas colaborativos.
A través de nuestro conocimiento técnico y experiencia internacional, te aportamos valor en:
- Gestión integral de la estrategia de financiación de la Innovación.
- Dinamización de consorcios empresariales y proyectos colaborativos de I+D.
- Optimización de la fiscalidad para mejorar la rentabilidad y la liquidez.
- Identificación de riesgos fiscales en España y en el extranjero y optimización del coste financiero que supone el IVA.
- Cumplimiento de las obligaciones declarativas a efectos de IVA que se deriven de las operaciones llevadas a cabo en el extranjero.
- Consultoría y asesoría en cumplimiento normativo en materia de impuestos especiales y aduanas.
¿Hablamos?
Por Donia Razazi, Senior Industry Expert en Ayming España
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